La Empresa de Soldadura Construcción y Montaje León (ESCOMEL) del joven emprendedor Dainier León Batista, alcanzó su personalidad jurídica al quedar inscrita en el Registro mercantil cubano.
Desde ahora este nuevo empresario privado y socio único, tiene la posibilidad de establecer contratos y expandirse, una de sus aspiraciones. «Este paso significa para mí un sueño realizado con nuevas metas y objetivos a trazar», señaló.
Aparecerán entonces mayores posibilidades para que Dainier haga realidad sus proyectos que durante mucho tiempo ha venido preparando. «Ya me encuentro enfrascado en la ampliación del negocio con la búsqueda de un local para crear un taller que nos permita trabajar la soldadura, además de la construcción y el montaje».
Su accionar llegará a varios sectores sensibles para la población con el único propósito de elevar la calidad de los servicios en ellos. Así confiesa que «ya se materializan los futuros contratos con la empresa de los servicios comunales, y también con los hospitales de nuestro municipio, así como viales, donde nos encargamos de la reparación del bacheo y las calles, que tanto lo necesita el territorio», declaró Dainier.
León Batista señaló además que todo esto, aunque parezca ambicioso, se puede lograr «siempre que haya ganas de aportar y hacerlo todo bien, no importa el tamaño, ni la envergadura que lleve. Tengo mi sistema y órgano de fiscalización montado con un económico, un contador, un especialista en los recursos humanos», detalló.
ESCOMEL cuenta por el momento con unos 50 trabajadores para cumplir sus propósitos, pero uno de los objetivos de su dueño es «llegar hasta los 100, que es lo que se me permite en la documentación, para hacer varias brigadas que atenderán el trabajo», manifestó.
Para materializar esta idea León Batista desea contratar a la juventud local principalmente, y también a otras personas que tengan experiencias en los oficios y trabajos que emprendemos. Hay que aprovechar la posibilidad que se nos dió, y la confianza de nuestro país de darle oportunidades a los jóvenes de emprender, crear proyectos nuevos y hacer por nuestra nación que tanto lo necesita», dijo el directivo.
El futuro de esta MIPYME, según las palabras de Dainier, es «seguir aterrizando sueños y buscar otros dentro y fuera del país donde se nos permita llegar», manifestó con un sano orgullo este humilde joven.
La pequeña empresa privada ESCOMEL tiene como objeto social brindar servicios de construcción de edificios, de proyectos de servicios públicos, efectuar trabajos de demoloción y brindar acciones de terminación y acabado de edificios.
Dentro de sus propósitos se incluye también las creaciones de productos terminados como luminarias, enchapes, y elementos de carpintería de aluminio con cristalería entre otros.
Ya alcanzada su personalidad jurídica León Batista podrá con ESCOMEL materializar ofertas también con las empresas de Diseños y Proyectos, así como de los Servicios Comunales, además de la SIGMATEL para la gestión de ventas online en Moneda Libremente Convertible (MLC).
Tomado de Radio Granma.
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